Como quiera que, en las últimas jornadas, ando metido en la búsqueda laboral, he decidido modernizarme (actualizarme, que se dice ahora, como si uno fuera una aplicación informática: Nepión 3.2). No quiere esto decir que haya abandonado los tradicionales métodos. Cada domingo sigo comprando uno o dos diarios para leer, esperanzado, las páginas coloradas (pues de color es el papel, no entiendo esa manía de llamar “sepia” a ese tono, pues todas las sepias que he visto eran blancas como el papel… blanco); vuelvo a retomar el listín telefónico para llamar a decenas de amigos olvidados desde el último despido (por si ellos supieran de algo...).
Mas, digo, me he actualizado. Heme introducido en la red. Encontré una w3 (¿cómo demonios se pone el maldito número para que parezca un exponencial y no un dígito ordinario?) que permite el envío del currículo directamente a las empresas oferentes de puestos. No hay más que introducir la historia personal en una determinada página, y allá que queda registrado y archivado. Cuando un servidor (el que esto escribe), repasando las diversas ofertas que presenta el servidor (el de internet), un servidor (éste), no tiene más que decirle al servidor (aquel) que destine una copia del currículo del servidor (el menda) desde el servidor (el internético), al otro servidor (el de la empresa). Comprendo que así explicado, como la totalidad de los referentes tecnológico-informáticos, resulta un tanto complicado, pero ante las posibilidades que nos plantea el presente, el presente (servidor) no puede sentir complejos, por muy complejo que pueda ser el servidor. Tras esta breve y concisa explicación, supongo, creo quedará claro, al menos, el por qué en las cuestiones informáticas, el idioma a utilizar mayoritariamente sea el de los muy nobles hijos de la Gran Bretaña. El inglés es mucho menos polisémico que el castellano.
Nepión
Mas, digo, me he actualizado. Heme introducido en la red. Encontré una w3 (¿cómo demonios se pone el maldito número para que parezca un exponencial y no un dígito ordinario?) que permite el envío del currículo directamente a las empresas oferentes de puestos. No hay más que introducir la historia personal en una determinada página, y allá que queda registrado y archivado. Cuando un servidor (el que esto escribe), repasando las diversas ofertas que presenta el servidor (el de internet), un servidor (éste), no tiene más que decirle al servidor (aquel) que destine una copia del currículo del servidor (el menda) desde el servidor (el internético), al otro servidor (el de la empresa). Comprendo que así explicado, como la totalidad de los referentes tecnológico-informáticos, resulta un tanto complicado, pero ante las posibilidades que nos plantea el presente, el presente (servidor) no puede sentir complejos, por muy complejo que pueda ser el servidor. Tras esta breve y concisa explicación, supongo, creo quedará claro, al menos, el por qué en las cuestiones informáticas, el idioma a utilizar mayoritariamente sea el de los muy nobles hijos de la Gran Bretaña. El inglés es mucho menos polisémico que el castellano.
Nepión
1 comentario:
Genial.
No se asuste vuecencia, que éste no es un comentario de los al uso, ya que no ofrezco propagandas ni millonarios timos. Servidor(el que para servirle a Vuecencia aquesto subscribe) ya le ha dejado en su servidor (de la cosa bitacórica) un mensaje en su primer mensaje (no confundir mensaje con mensaje, hablemos-más bien escribamos- con propiedad.
Saludos
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